Laura de Jesus
Cruasán
Dijimos poco o nada
Y no me perdí las palabras
-Tenemos que hablar...
Y nuestros cuerpos hablaron
para nosotros, en caricias sueltas
- Qué bien hablaste...
Luces, niebla y lluvia
Vimos cómo la ciudad se retiraba
y nos dimos cuenta de que
una gran película está hecha
de pequeños momentos
Y la mañana llegó temprano
sin que nos diéramos cuenta
y tenías un brillo en los ojos
y un croissant mixto en las manos
Dormí en el cansancio
de las delicias y el amasado
Y busqué en las profundidades de tus brazos
De mis sueños, graba momentos como este
Me pregunto si esto era lo que quería
Encontré un viejo poema,
Respuesta a la pregunta
Cómplices, Sombra Elegida
Tu nombre, la creación de vínculos
y, sólo entonces, de lo imprevisto
Pude ganar alas en la risa
y cómete el croissant.
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